martes, 18 de noviembre de 2014

[Francia] Carta abierta a la madre de Rémi Fraisse

La siguiente carta de Farid El Yamni – hermano de Wissam, asesinado por la  policía en 2012 – está dirigida a la madre de Rémi Fraisse (21), asesinado por la policía en las primeras horas del 26 de octubre del 2014. Wissam El Yamni (30) fue brutalmente asaltado por los polis en  Clermont-Ferrand el día de Año Nuevo, antes de ser detenido. Cayó en coma y murió en el hospital el lunes 9 de enero del 2012. Su muerte desató disturbios y quema de coches. Farid quería que su texto fuese público, pero también que fuese enviado a los padres de Rémi.
Extraído de Contrainfo

 3 de noviembre del 2014
Le escribo esta carta en un tiempo que en París se condena a las manifestaciones violentas y se alaba a las sentadas pacíficas. Perdí a mi hermano en condiciones bastante similares a las que usted ha perdido a su hijo. Mi hermano, que cuidó mucho de mi madre, nos dejó y no volverá. La pérdida de mi hermano me causó un inmenso dolor que siento cada vez que el Estado asesina otra vez. “Allí, donde crece el peligro, también crece lo que salva”, dijo alguien. Cada vez que el Estado asesina también es una oportunidad para pararlo, forzarle a cambiar, y devolver la dignidad perdida a todxs lxs demás.La muerte de Rémi está ligada a mucho más que a la historia de una vida; está ligada a la vida de todxs nosotrxs, individual y colectivamente. La criminalización que ocurrió es terrible; fue lo mismo para nosotrxs. Me di cuenta más tarde de que fue deliberada. Sólo quería una cosa: que la Justicia llegase a la verdad y devolviese la dignidad que mi hermano merecía, en calma, y que esa historia beneficiase a todxs, a nosotrxs lxs gobernadxs con objeto de querernos mejor, igual que a la policía para reconciliarlos con la nación. Pensaba que la policía no podría aceptar asesinatos entre sus filas, no la conocía lo suficiente entonces. Estaba equivocado. Los barrios han ardido; llamamos a la calma: cada coche o contenedor quemado era percibido como un insulto, como una espina en pleno corazón, una espina que empujaban cada vez más adentro.

Luego pasó el tiempo, nos prometieron la verdad, pero no nos dieron nada excepto mentiras, nada excepto falsas promesas, como a muchxs otrxs antes de nosotrxs. La gente nos lo avisó, pero no les creímos. François Hollande, él mismo tomó a mi madre en sus brazos y le prometió que nos ayudaría a arrojar luz a la muerte de su hijo. Sin justicia ni verdad, vivimos el tiempo que pasaba como una sentencia de prisión. Estábamos aún en prisión, asfixiando y pidiendo ayuda a la Justicia.Y entonces nos dimos cuenta que nuestro caso no estaba aislado; otras tantas familias experimentaron, y todavía experimentan, lo mismo. ¡Hay tantas humillaciones y mutilaciones cometidas conscientemente por la policía y encubiertas por la Justicia, tantas!

También descubrimos cómo piensa la policía, es algo escalofriante. Aquí va un ejemplo: el pasado miércoles, tras la manifestación de París, uno de los oficiales de policía me dijo “1–0” delante de sus colegas de la comisaría de policía, que se reían cuando nos vieron llevando la camiseta “Urgencia: Nuestra Policía Asesina”. Nadie le dijo nada, nadie… Con ejemplos de este tipo, que tanta gente experimenta a lo diario en Francia, no pueden más con esta policía, ni pueden ver una salida de todo eso.

Entiendo las llamadas a la calma; nosotrxs hicimos lo mismo entonces. Usted también tiene que entender que mucha gente ya no crea en este sistema que da impunidad de facto a la policía. Tiene que entender que la no-violencia es concebible sólo si supones que el oponente es capaz de cuestionarse a sí mismo: ellos son humanamente incapaces de eso, porque consideran que poner en cuestión a la policía significaría poner en cuestión al Estado. Durante 40 años, la policía asesina con impunidad, repetidamente. Durante 40 años, hemos estado presenciando el mismo método de encubrimiento de los asesinatos del Estado, a pesar de los vídeos, lxs testigos, las evidencias. Durante 40 años, hay sentadas, manifestaciones, libros, declaraciones oficiales de políticos, declaraciones dirigidas al ministro del interior. Durante 40 años, eso no ha funcionado.
Aquí va como funciona: la agencia de noticias AFP emite la historia de última hora, el fiscal miente, se abre una investigación chapucera y de mala calidad que termina luego de muchos años en una condena ridícula, o incluso una falta de condena. Lo peor es que los que enterrarán el tema serán promocionados y los que asesinaron a nuestrxs hermanxs, nuestrxs hijxs o amigxs serán tratados como campeones por sus colegas. Esta es la realidad que usted va a experimentar también.

Manuel Valls, primer ministro frances, dijo que los disturbios son un insulto a la memoria de Rémi, pero que sepa usted que Manuel Valls, mediante su inacción para combatir la impunidad de la policía, es el primer asesino de su hijo. Es un criminal reincidente. Vino a Clermont-Ferrand una semana antes del falso informe de la contra-autopsia, de la que él conocía los resultados, y no habló del caso sino para mejor condenar la violencia de lxs que se rebelaron contra el asesinato de mi hermano.

Señora, la gente está luchando por Rémi, por su dignidad y sus ideales. Luchan por usted, por todxs nosotrxs, por que la fraternidad sea efectiva. Lxs que luchan conocen lo suficiente la malicia de nuestros gobernantes para entender que están intentando hacernos creer que  vivimos en un Estado basado en la ley, mientras vivimos en un Estado basado en el deber. El Estado no respeta la ley que exige que nosotrxs respetemos. Juega con nuestros cuerpos, nuestra seguridad, nuestro dinero y nuestra dignidad. Exige que estemos arrodilladxs, y esto es un imperativo categórico.

Le escribo esta carta a usted, y a todxs lxs que lean mis palabras, para hacer saber que hoy, más que nunca, entiendo cómo la no-violencia en cuestiones de crímenes de Estado tiene sus límites. Porque por su impotencia, la no-violencia a veces es más condenable, más mortal que la violencia misma. Los que nos gobiernan son maliciosos, arribistas, sádicos y reincidentes. Hay que echarlos fuera por todos los medios que sean necesarios.

Farid El Yamni, hermano de Wissam El Yamni, asesinado por la policía el 1 de enero del 2012 en Clermont-Ferrand.

[México] Contra la comunidad estudiantil, contra la comunidad activista (Sobre el auditorio Che Guevara)

En defensa de los espacios autónomos para conspirar contra el estado y el capital. Forjar Comunidades de lucha en oposición a la lógica totalitaria de la mercancía.
 
“No se trata de lo que tal o cual proletario  incluso todo el proletariado considera como fin en un momento dado. Se trata de lo que es el proletariado y de lo que, conforme a su ser, se verá obligado a hacer históricamente.” Marx, La sagrada familia

La confusión, la apatía, el desinterés, el enojo y la frustración son las sensaciones y conductas que prevalecen en el sector de proletarios que estudian, situación que cobra relevancia y se manifiesta crudamente en los momentos en que la lucha de clases se agudiza presentando significativa relevancia y particularidades en espacios y tiempos concretos, como es el caso del conflicto en torno a la Okupa Che Guevara. Este desinterés manifiesto entre nuestros hermanos de clase es alimentado por múltiples factores entre los que podemos destacar entre otros la asfixiante nebulosa desinformativa propagada por los agentes de prensa del Estado-Capital, de izquierdas y derechas; por el discurso mistificador dirigido por las autoridades universitarias que alimenta la perspectiva de que el único papel que deben desempeñar los “universitarios” es cumplir con su papel de buen estudiante, delegando su politicidad, su facultad como ser político, en entidades burocráticas, especializadas, en instituciones fetichizadas, el mismo fetichismo del poder con que opera la apabullante mega máquina estatal operando en el micro-espacio de la “universidad”.

Esta mistificación de la comunidad estudiantil es asimismo reforzada por otra entidad igualmente abstracta, la denominada comunidad activista, de quienes podemos apreciar como constituyen una entidad identitaria en torno a elementos discursivos de diversa índole, y cuyos “máximos exponentes”, comparten el rasgo común de autoproclamarse “representantes de la comunidad estudiantil”,  ofreciéndonos miserables espectáculos donde escenifican una celosa pugna entre sí por obtener su certificado de políticos profesionales, ensayando sus mejores números añorando el momento en que puedan dar el gran paso para convertirse en burócratas sindicales, vulgares politiqueros, líderes de masas o mediocres intelectuales de izquierda autoproclamados líderes de opinión. El complemento de la comunidad activista es personificada por el sector ultra, radical, compañeros en los que se hace patente un autentico desprecio al mundo de la mercancía, un odio de clase natural, vital y necesario advertido en cada episodio de lucha callejera, haciendo retroceder a la policía, episodios donde nos hemos encontrado cómplices; pero es necesario advertir que a menudo no hacen más que regocijarse en una reducida identidad de “ultra-radical”, y de forma intransigente se imposibilita el crecimiento cualitativo y cuantitativo de nuestra comunidad de lucha, alimentando un sectarismo que aísla a valiosos compañeros.

Es por esto que exhortamos al trabajo sin tregua por romper la mistificación de estas nocivas identidades, de la comunidad estudiantil y la comunidad activista, invitamos a nuestros hermanos de clase que se desenvuelven como estudiantes, dando clases, barriendo pasillos a forjar juntos una comunidad de lucha a la altura de la ofensiva que la lógica mercantil despliega sobre nuestra clase, degradando cada vez mas nuestras condiciones de vida. Nuestra esencia proletaria no está localizada en la función que desempeñamos como comunidad para el capital: obrero, estudiante, intelectual, etc. sino una oposición intrínseca al capital, en tanto que la lógica de reproducción mercantil nos apabulla en cada espacio de nuestra reproducción social, imposibilitando que nos apropiemos de nuestras vidas y desarrollemos el conjunto de capacidades, que el capital se encarga de separar, la separación es el producto artificial que se desprende de la lógica de reproducción del capital, la unidad, la comunidad es la esencia del hombre social.

Nosotros como proletarios no tenemos ningún interés objetivo en defender la identidad que nos asigna el capital, estudiante, intelectual, obrero, activista, okupa, incluso anarquista, y parafraseando a algún compañero no nos complace asumir una identidad proletaria, sino desde esta condición concreta, objetiva, como entidad negada por la mercancía, materialidad concreta en tanto negación de la misma lógica que nos vulnera y lastima a cada instante, que es dolor manifiesto de saber que no somos dueños de nuestras vidas, desde la contradicción planteada entre mercancía y vida humana, es que apelamos a la constitución de comunidades de lucha multiplicándose y en lucha frontal con el Estado.

Por lo anterior manifestamos una oposición en la práctica a la conformación de una estructura tripartita de administración, de los espacios autónomos concretamente el Che Guevara y de cualquier otra estructura que mantenga esta separación recreando la mistificación de intereses particulares y sectores separados. Estas posiciones solo vienen a poner de manifiesto la posición de quienes quieren que todo siga igual: el estudiante en sus libros, el académico adoctrinando, la autoridad reprimiendo y el trabajador recogiendo la mierda de todos.

Apostamos a la construcción, reforzamiento y multiplicación de espacios autónomos desde los cuales conspirar contra la creciente ofensiva del capital que se agudiza por todos los rincones del planeta y en este espacio concreto llamado universidad adquiere un cariz particular en tanto que los ataques orquestados desde la rectoría, operados por el izquierdismo radical de factura paramilitar, replicados y legitimados  por su patética intelectualidad y los mas pequeñitos y ridículos de sus peones, léase, consejeros técnicos, ha encontrado la oposición de un bloque de lucha que no está dispuesta a poner la otra mejilla, dando muestra de dignidad y coraje de nuestra clase, pero que presenta las carencias y debilidades, y  advierte la necesidad de conjuntar las iniciativas y los esfuerzos del resto de nuestros hermanos de clase, con los que compartimos los espacios concretos, y conformar  una comunidad de lucha que incendie la pradera de la guerra social. Por esto apostamos por el reforzamiento de espacios en donde podamos reconocernos, aprender del otro, y ejercitar nuestras capacidades humanas que la mercancía niega, reduciéndonos a un triste saco de carne y de huesos, manteniéndonos en depresión o cautivos de las adicciones.

Solo la lucha frontal posibilitara la apropiación de nuestras vidas, estas líneas por supuesto no son definitivas, mucho menos son escritas desde la comodidad que ofrece el aislamiento y la distancia del conflicto, su objetivo es el debate compañero y la apuesta practica. 

¡Por la auto-organización de la lucha de clase! ¡Conformar Comunidades de Lucha!

¡Por la defensa de la Okupa Che y la multiplicación de espacios autónomos para conspirar!

¡Presos a la Calle! ¡Calles para la Insurrección!

¡Por el Comunismo y la Anarquía! 

# Primavera 2014, México.
# por Grupo Anarquista Ruptura Proletaria

[Ecuador] 15 de Noviembre: ¡Guerra de Clases, Guerra de Memorias!

Después de años de lucha, organización, propaganda y agitación, el 15 de Noviembre de 1922 en Guayaquil-Ecuador, el proletariado de esa época (ferroviarios, cacahueros, panaderos, astilleros, tipógrafos, albañiles, cocineras, lavanderas, etc.) impone la huelga general y toma el control de la ciudad (se habla incluso de “el Soviet o Consejo Obrero de Guayaquil”). Pero a la burguesía (agroexportadores, banqueros, industriales) le aterra que toda esta “chusma” sublevada vaya por más, y el mismo día manda a reprimirla brutalmente con su jauría policial y militar. La jornada de lucha se trastoca en masacre (más de 1000 muertos), el terror del Estado burgués tiñe de sangre proletaria las calles y las aguas del puerto principal, mientras “las blancas y delicadas manos aplauden desde sus balcones” la vuelta a su “calma” burguesa. Tal fue “el bautizo de sangre del proletariado” en este país. Pero más que por la fuerza de nuestro enemigo de clase, esta fatal derrota se debió a las propias debilidades de nuestra clase proletaria en ese momento: falta de autonomía y beligerancia frente al gobierno y, sobre todo, falta de radicalidad o de ruptura con el programa socialdemócrata (incluidas sus versiones “socialista” y “anarquista”), al mismo tiempo que falta de ruptura con el sindicalismo, con el patriotismo y con la religión, y finalmente falta de dirección revolucionaria, armamento y ofensiva.

El contexto mundial de aquella época era de crisis capitalista, guerra imperialista y revuelta proletaria, así como lo vuelve a ser el contexto mundial actual, con la importante diferencia de que en ese entonces la crisis no era tan generalizada y catastrófica como la de ahora y que existía un masivo y potente proletariado revolucionario internacional e internacionalista que, en cambio, hoy todavía no existe o, mejor dicho, todavía es débil. Por lo tanto, las lecciones dejadas por las luchas de nuestros hermanos de clase de ayer son válidas y útiles para los proletarios en lucha de hoy día y de todas partes. En nuestro caso, una de esas lecciones es -en palabras de uno de sus propios protagonistas- que “el 15 de noviembre de 1922 el proletariado aprendió a conocer quiénes son siempre sus enemigos mortales”. En efecto, tanto ayer como hoy nuestros enemigos siguen siendo los mismos: empresarios, banqueros, políticos (de derecha y de izquierda), militares, policías, curas, jueces, periodistas, sindicalistas... Pero no como grupos o personas en particular, sino como agentes de las relaciones de explotación y dominación capitalistas, de esta inhumana y asesina sociedad mundial de la mercancía, el dinero, el trabajo asalariado, el Capital y su Estado: nuestros mortales enemigos de siempre.

Hoy en día en este país, junto a la burguesía, dos enemigos más se destacan: el gobierno y los sindicatos. Este gobierno, por más que diga ser “revolucionario”, “socialista” y hasta “de los trabajadores”, en realidad es -como todo gobierno- el guardián y el administrador de la explotación y la normalidad capitalistas, de la dictadura democrática y ciudadana del Capital sobre nuestra clase, el proletariado. De hecho, este 15 de noviembre del 2014 hace un mitin-show para anunciar públicamente su “paquete de reformas” al código de trabajo, es decir su ajuste a este clásico instrumento de control y explotación capitalistas sobre la clase trabajadora para, a su vez, ajustarnos, explotarnos y someternos más. No cabe duda de que este gobierno progresista es burgués y enemigo del proletariado. Por si fuera poco, usurpa esta fecha histórica de nuestra clase para cínicamente intentar distorsionar y hasta vaciar su contenido proletario y anticapitalista; para espantar el solo recuerdo de revolución social proletaria, ese fantasma que no ha dejado de recorrer el mundo entero: el comunismo, la anarquía. Lo peor es que si lo hace es porque aquí y ahora el proletariado aún brilla por su ausencia en tanto fuerza autónoma como para hacerle una guerra de clases y de memorias real. Y si algún momento nuestras protestas como clase llegaren a salírsele de las manos y amenazar su poder –que es el poder estatal del Capital-, este gobierno no dudaría en reprimirnos de similar forma que hace 92 años.

Por su parte, los sindicatos (todos sin excepción) no son más que los mercaderes o negociadores de la explotación de nuestra fuerza de trabajo frente a la patronal y el Estado. Siempre lo han sido y lo serán. Muestra irrefutable de ello es que este 19 de noviembre hacen una nueva marcha para “rechazar” –entre otras cosas- las “enmiendas constitucionales” y las reformas gubernamentales al código de trabajo, exigiendo en cambio un código dizque “de y a favor de los trabajadores”, es decir un látigo legal más flexible y suave de la explotación capitalista, de la esclavitud asalariada, a la cual ni la nombran, mucho menos la critican ni la combaten. Como siempre, “luchan” contra los efectos pero nunca contra la causa o la raíz de todos los males que padecemos los proletarios: el capitalismo. “Luchan” sólo por derechos, reformas, migajas de quienes nos explotan y oprimen. Así acorralan, desvían y anulan las reivindicaciones y protestas proletarias. Y asimismo si éstas llegaren a desbordarlos, los sindicatos (y partidos y frentes de izquierda) harían todo lo posible para apagar la lucha proletaria autónoma. Son bomberos, reformistas, oportunistas, contrarrevolucionarios... Los sindicatos también son enemigos del proletariado, por tanto hay que romper con ellos y tratarlos como tales.

Proletarios: la experiencia del pasado y del presente nos demuestra que, para satisfacer nuestras necesidades e intereses de clase, debemos luchar por fuera y en contra de los gobiernos, los partidos y los sindicatos, de manera independiente o autónoma, por todo y hasta el fin, más allá y en contra de toda frontera y nacionalidad. En estos momentos, nuestros hermanos de clase que luchan en México, Chile, Brasil, Medio Oriente, Grecia... hacen lo que pueden al respecto y así tensan el hilo histórico-mundial de la lucha proletaria contra el capitalismo. Nuestra memoria histórica, nuestro programa revolucionario, nuestra solidaridad de clase, nuestra organización autónoma, nuestra acción directa: han sido, son y serán nuestras mejores armas.
Proletarios/as:
15 de Noviembre: ¡Ni perdón ni olvido, ni paz social ni amnesia histórica:
guerra de clases y guerra de memorias!

¡Ni gobierno ni oposición, ni derechas ni izquierdas:
ambos son nuestros enemigos de clase!

¡Ni leyes ni “derechos” ni reformas!
  ¡Ni representantes ni intermediarios!

¡Organicémonos y luchemos por nuestras necesidades humanas
de manera directa, autónoma y radical,
afuera y en contra de sindicatos, frentes y partidos!

¡Reapropiémonos de nuestro programa revolucionario histórico:
Abolición de la propiedad privada, el trabajo asalariado, la mercancía,
el Capital, las clases, el Estado, las patrias, las razas, las religiones!

¡Por la ruptura y la revuelta proletaria, aquí y en todas partes!

¡Por la revolución comunista y anárquica mundial!

# por Proletarios Revolucionarios
# Quito-Ecuador, Noviembre 2014

[México] Comunicado desde las barricadas que resguardan Ciudad Universitaria

A estudiantes, trabajadores y todos los explotados:        

El 15 de noviembre, al medio día, se suscitó un hecho culminante dentro del historial represivo operado por las autoridades universitarias siguiendo las directrices del estado mexicano. En el cuál, en las inmediaciones de la okupa Che Guevara un grupo de policías de investigación, a bordo de un automóvil (que fue abandonado en el lugar y que posteriormente se confirmaría que las placas que portaba corresponden a un vehículo con reporte de robo), comenzó a hostigar a un grupo de compañeros quienes al momento de exigirles que se retiraran, fueron agredidos por estos con una arma de fuego, accionándola en al menos diez ocasiones. Resultado de esto fueron dos compañeros heridos y un perro, uno de los compañeros fue trasladado de urgencias a la clínica 32 del seguro social donde le negaron la atención y donde policías comenzaron a hostigarlo y amenazarlo, a él y a su acompañante. Finalmente fue trasladado en contra de su voluntad a la agencia del ministerio público en Coyoacán 1, en donde al no tener algún elemento para armar uno de los acostumbrados montajes policiacos, fue puesto en libertad.       
 
 Este hecho ha causado conmoción en distintos sectores de la sociedad y al poco tiempo, se dieron cita numerosas personas al lugar de los hechos para valorar las formas en que colectivamente se hacía frente a esta agresión del estado. Después de valorar que la labor de peritaje era tarea estéril, puesto que está claro que este hecho fue orquestado desde el Estado y la rectoría de la UNAM, la colectividad decidió deshacerse del vehículo, llevándolo a la avenida de los insurgentes, en donde, inmediatamente arribaron cientos de granaderos y policías preventivos, y ante la efervescencia en un ejercicio pleno de dignidad, compañeros hicieron frente al cerco policial. En el transcurso de esa noche el acoso policiaco en las inmediaciones de ciudad universitaria se intensificó.        
 
Para el día 16 de noviembre hubo una concentración masiva en las afueras de la rectoría, en donde algunos compañeros decidimos mantener bloqueados los accesos a ese recinto donde se orquesta la represión. Mientras esto se llevaba adelante, compañeros que protestaban a las afueras de centros comerciales aledaños, junto con grupos de personas solidarias, decidieron reforzar las barricadas en algunos puntos de ciudad universitaria, alzadas como forma de protesta ante la represión.
 
Estos hechos forman parte de la escalada represiva en todo el territorio nacional, ante la creciente movilización de distintos sectores de la sociedad explotada y, en particular, de núcleos específicos y espacios de organización autónoma, como la okupa Che y la reciente embestida contra la Comuna 23 de la Escuela Nacional de Trabajo Social, por mencionar algunos, en donde se asume una crítica práctica a la totalidad del estado capital y que se distinguen por romper con las dinámicas de claudicación y oportunismo de la generalidad de los grupos del izquierdismo universitario.
    
Al interior del espacio universitario se ha materializado la represión a distintos compañeros, desde la orden de mantener preso a Mario González (quien ya fue liberado) hasta la orden del asesinato de Carlos Sinhué Cuevas, pasando por el acoso, intimidación y amenazas de muerte a compañeros que se organizan políticamente, dentro y fuera de la Universidad.

La represión es generalizada, politizados, organizados, conscientes o no, el terrorismo del estado capital, traspasa a toda la sociedad, el fundamento de la misma es la violencia. Hacemos un llamado a toda la sociedad explotada a que rompa con los discursos de pasividad y de confusión que nos imponen nuestros enemigos, llamando a señalar con prejuicios lo que consideran actos vandálicos o hechos aislados, como el conjunto de medios de comunicación reaccionarios, democráticos y ciudadanos nos quieren imponer.

Los recientes hechos de terrorismo de estado como Ayotzinapa, Tlatlaya, la Parota o el encarcelamiento de algunos compañeros en el distrito federal, como el caso de Luis Fernando Sotelo a quien se responsabiliza de los disturbios en el metrobus universidad y los recientes arrestos de Brian Reyes y Jacqueline Santana, forman parte de una misma política represiva de terror, lo que nos demuestra que la única salida a este trabajo común hacia la profundización y generalización del combate radical, por todos los medios, a este sistema de explotación, que es una tarea que debe ser afín a todos los explotados del mundo.

De frente contra la represión generalizada del sistema capital.
Libertad a todxs lxs presxs y procesadxs por el democrático Gobierno del Distrito Federal.
Muerte a la dictadura capital.
Desde las barricadas de ciudad universitaria.
16 de noviembre de 2014.

# Origen desconocido, extraído de Antagonismo.net
#México, noviembre de 2014

[México] Sobre la quema del metrobus Ciudad Universitaria

A todxs:

Los días 5 y 6 de noviembre en el contexto de la movilización y la protesta de distintos sectores del proletariado(obreros, estudiantes, desempleados) fueron detenidos y procesados penalmente por el democrático sistema judicial mexicano, al menos una decena de compañeros, en el transcurso de las mismas a través de la solidaridad, se consiguió la liberación de los mismos, exceptuando al compañero Luis Fernando Sotelo, detenido en las inmediaciones de insurgentes sur, mientras se llevaba adelante un acto de sabotaje que está completamente inserto en la dinámica general de la lucha de clases, y al que se le imputa la responsabilidad integral de los actos, presentando, entre otros, cargos por ataques a la paz pública, ataques a las vías de comunicación con agravantes, por lo que en estos momentos se encuentra en el juzgado 52 de lo penal en el Reclusorio Sur con la sentencia ratificada del auto de formal prisión.

En prácticas y ejercicios que van de la espontaneidad a la organización (como unidad, y mutuamente determinados) se dieron esfuerzos por recuperar y afirmar formas de lucha que no le son nada ajenos a nuestra clase, como el sabotaje y el boicot atentando directamente a los intereses materiales de nuestros enemigos de clase, a nuestros explotadores y el conjunto de administradores de esta violencia (políticos, empresarios, y los perros que materializan el terror democrático del capital: jueces y policías). Por toda la geografía del país, sectores del proletariado, llevan adelante este tipo de acciones, así en Guerrero, como en Oaxaca, Puebla o el Estado de México: el enfrentamiento con los esbirros del estado, se prende fuego a comisarias, municipalidades y palacios de gobierno, se efectúan piquetes carreteros, se abre paso la expropiación y se boicotean los grandes centros comerciales, ahora en un cínico e hipócrita gesto de un amplio espectro grupuscular del izquierdismo se busca aislar y marginar las acciones que algunos compañeros han llevado adelante en la ciudad de México.

Como sabemos la represión y el terrorismo del estado-capital, se abre paso desde los aparatos ideológicos de estado, jugando un papel esencial los medios masivos de comunicación, desde los explícitamente reaccionarios e imbéciles, como los noticieros televisivos, hasta los denominados medios ciudadanos, democráticos y progresistas (Jornada, Aristegui, Proceso) que se apresuran a generar el consenso de los límites de la protesta pacífica y ciudadana y lo que ignorante y tendenciosamente denominan acciones aisladas de vándalos e infiltrados en la protesta.

La represión del estado nunca espera, es sistemática y estratégicamente desplegada, desde a legislación jurídica, terrorismo que se desenvuelve desde juzgados, tribunales, cárceles, y las muestras explicitas y concretas de violencia del ejército y la policía, tortura, desaparición, asesinato. Esta violencia, es común a todos los explotados, a sangre y fuego, se mantiene la explotación de los trabajadores, se mantiene la libre circulación de mercancías, el estado no necesita que “lo motiven” a reprimir, no busca excusas su carácter es la violencia y el terror.

Los discursos ciudadanos y democráticos contribuyen a la confusión generalizada, al rechazo de nuestra clase que comienza a movilizarse y que es presa de los embates ideológicos nuestros enemigos, que es controlada y diezmada por las ideologías de estos hipócritas grupos de la izquierda del capital, que no cesan de llamar y trabajar por el aislamiento de los compañeros que llevan adelante acciones autónomas. El raquítico análisis de estos grupos, o bien el descarado papel de clase que juegan, a favor de la democracia y la pasividad, se ampara en un pseudodiscurso de realismo político y organizacional, insiste en separar estas acciones como cuestiones voluntaristas, ciegas, desesperadas, apuntalando su perspectiva gremialista, gradualista del desarrollo del conflicto de clases, lo que confirma el terreno de clase en el que se mueven estos grupos, el del estado y el capital.

Pero también afirmamos que el trayecto hacia la constitución de un bloque autónomo del proletariado en lucha no se limita a lo que muchos denominan “acciones contundentes” llevadas adelante por compas que de forma consciente o no apelan a la auto marginación y la autosatisfacción, pero que pese a que no lo conciba sus elucubraciones están insertos en una dinámica general de la lucha de clases. El sabotaje y el boicot, el atentado contra la materialización del dominio de la mercancía, forman parte del abanico de manifestaciones de la lucha del proletariado, pero es un error suponer que es únicamente a partir de estas que puede concretarse la agudización y la generalización de la guerra de clases, y afirmarse la autonomía del proletariado en contra y por fuera de todas las estructuras del estado y el capital.

La lucha del proletariado contra el estado-capital nunca será apegada a la democracia, no será legal, ni ciudadana, por el contrario tendrá que romper tajantemente con estas ideologías de la contrarrevolución democrática del capital; no es gremial, ni gradualista como imponen las mistificaciones del izquierdismo recalcitrante, y para nada se limita a las acciones aisladas de modernos o viejos vanguardistas y especialistas en las armas o “la organización”. La violencia de clase, tanto como la creación de estructuras organizacionales donde fluye el debate y la comunicación donde los proletarios se reconozcan y puedan barrer anquilosadas burocracias, delegaciones y mediaciones, donde desfilan lidersuchos que el día de mañana estarán vendiendo nuestro pellejo como líderes sindicales, o parasitando como democráticos diputados, forman parte de una unidad.

Hacemos un llamado a los compañeros que sinceramente busquen cristalizar una oposición real a lo que hoy nos plantea la lucha de clases, afirmamos que espontaneidad y organización, no son antagónicos, son elementos que van de la mano correspondiéndose dialécticamente. Llamamos a todos los compañeros movilizados y a toda nuestra clase a no bajar la guardia en la guerra de clases, a establecer una estrategia contundente contra la represión y el terrorismo generalizado del estado-capital, que no puede ser otra que la búsqueda por la generalización y agudización del conflicto en el tiempo y el espacio, que la única justicia que puede existir para los compas masacrados en Iguala, para  los presos y procesados en el estado de México, Puebla, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, o la ciudad de México, como el más reciente situación de nuestro compa Luis Fernando, es la que podemos hacer combatiendo con todos los medios a nuestro alcance al estado, transcendiendo todo tipo de banderas coyunturales, así como formalismos y estructuras, que nos conducen hacia el desfiladero de la democracia y el ciudadanismo, en contra de los corrales que nos impone la izquierda del capital que buscara inmovilizarnos introduciéndonos el miedo, buscando la dispersión y el aislamiento, desmoralizarnos con todos sus discursos, con su realismo político y sus salidas negociadas.

¡Solidaridad con Luis Fernando Sotelo y todos los presos y procesados de la lucha de clases!

¡Por la continuidad, profundización y generalización de la guerra de clases!

¡Por la autonomía del proletariado, en contra y por fuera de todas las estructuras del estado capital!

# Algunas compas, 8 / 11/ 14

¡A los caídos, despertad es hora de levantarnos!

Proletarios y proletarias

     “La calma del momento contiene en potencia la insurrección del mañana. La revolución es la consecuencia lógica de los mil hechos que han constituido el despotismo que ahora vemos en agonía. Ella tiene que venir indefectiblemente, fatalmente, con la puntualidad con la que aparece de nuevo el sol para desvanecer la angustia de la noche. Y vais a ser vosotros, obreros, la fuerza de esa revolución.” Ricardo Flores Magón.

Vecina, vecino, tú que te levantas a diario para ir a trabajar, tú que pasas tanto tiempo en el trasporte público, tú qué sabes que cada día alcanza menos el salario, ya de por sí miserable, te preguntas por qué a pesar de tantos sacrificios, limitaciones, deudas, ahorros… todo sigue igual o peor y no le vemos salida a este mundo de humillación, donde nuestra dignidad está cada vez más pisoteada y nuestra vida cada vez más devaluada.

La respuesta, la causa de nuestros males es el Capitalismo, que domina al mundo en nuestros tiempos… pero ¿Dónde está? ¿Quién es? ¿Qué es el capitalismo? No es un señor vestido de traje, no es el presidente de una república, ni mucho menos… el capitalismo está con nosotros todos los días, cerca, en nuestras relaciones sociales mercantilizadas, en el poder que le permitimos tener a los dueños del Capital (burgueses), en cuestiones de dominación que aparentan ser muy simples como el mecanismo de compra-venta….

Nuestro mundo se basa en la sagrada mercancía, en el hecho de que todas nuestras relaciones están objetivadas a partir del hecho de comprar y pagar, de obtener dinero para poder sobrevivir: desde que nacemos hay que pagar el parto, los chequeos, la ropa, los pañales, la leche, todo, y así durante toda nuestra vida, -y si no tenemos para pagar todo ello nos queda la mendicidad, la vagancia, la miseria o la muerte- es entonces y hasta que morimos que pagamos nuestro funeral, la tumba, el cementerio, las flores, etc… Y esto es importante saberlo porque es a partir de nuestra necesidad de obtener dinero para sobrevivir que los que carecemos de la propiedad del capital-medios de producción no tenemos más opción que vender la única mercancía que tenemos -nuestra fuerza de trabajo- a los dueños del Capital, los adinerados, los patrones, la burguesía. Y es ésta, nuestra condición de asalariados y explotados la que nos condiciona como la clase proletaria.

En otros tiempos los regímenes monárquicos y los Estados despóticos administraban la esclavitud de los hombres, en nuestros tiempos este papel lo ha tomado el Estado democrático, cuya labor es legitimar a la clase que nos explota. La democracia es el sistema de leyes que avalan que haya ricos y pobres, patrones y empleados, la democracia es la dictadura del rico capitalista, y las instituciones del Estado son las encargadas para que estas leyes se cumplan. La democracia nos convierte en dóciles-maleables y mansos “ciudadanos”. Es por todo ello que ningún político nos dará las condiciones para reapropiarnos de nuestras vidas, ya que todo político sea de partidos de derecha o de izquierda, “todos” son empleados de la clase privilegiada, ellos sólo son perros lacayos sedientos de poder, dispuestos a todo para mantener las cosas como están, es decir, conservar las relaciones entre oprimidos y opresores.

Negar la democracia es negar nuestra condición de ciudadanos, de sumisos al poder y negar nuestra credibilidad a todo “politicucho” que se burla de nosotros con sus leyes que nos hacen más miserables. Es negar también la dictadura del capitalismo, sistema que exprime nuestras vidas y que mediante nuestro trabajo nos esclaviza a costa del enriquecimiento de unos cuantos patrones y empresarios burgueses.

Compañero, compañera proletaria, no votes, tu voto es la muestra que ellos necesitan para seguir oprimiéndonos, para continuar con el orden actual del capitalismo y la mercantilización de nuestras vidas. Todos prometen y prometen, años y años de democracia y ningún cambio, siempre ricos y pobres. Incluso en los países más democráticos como en Estados Unidos o Inglaterra existe la miseria, existe la explotación y la humillación a nuestros hermanos y hermanas de clase. Mientras continúe el capitalismo como poder totalitario, seguirá destruyendo el mundo, seguirá quitándole las tierras a los campesinos, seguirá asesinando estudiantes, en síntesis los explotados, masacrados, desplazados y encarcelados seguiremos siendo los mismos.

¿Pero acaso entonces ya no hay solución? Sí, si la hay, pero no es mediante sus instituciones ni mediante “políticos héroes”, la única posibilidad para acabar con la explotación y miseria, es la toma de consciencia primero y la puesta en práctica de esa conciencia, organizados, trabajando entre nosotros de manera autónoma, sin ninguna representación, sin ningún líder. Sólo nosotros de manera organizada y enmarcados en la lucha contra todo lo que nos explota, es decir no sólo contra los políticos corruptos o las malas administraciones, sino que también saboteando su lógica democrática, aboliendo nuestra condición de trabajadores esclavizados, sólo así podemos acabar con estas condiciones, enterrando y destruyendo lo que nos destruye.

Es hora compañero, compañera de pasar al frente, asumiéndonos como revolucionarios, entonces acabaremos de una vez y para siempre con la sociedad de clases y todas las formas que nos explotan.

 ¡Ni políticos ni patrones! ¡Ni dictadura ni democracia!
¡Revolución social! ¡Por el comunismo, por la anarquía!
 
# Proletarios Sembrando Rebelión, México (Noviembre) 2014
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[Francia - Asesinato de Rémi] Y ahora ¿qué hacemos?

La noche del sábado, en las obras del pantano de Sivens, hacia las dos de la madrugada, murió Rémi. A los que han estado presentes los seis últimos meses en el Testet, a quienes han estado en las batallas de la ZAD de Notre-Dame-Des-Landes, a todos los que al menos una vez han estado a un palmo de los maderos, resulta evidente que esa noche no hubo ni error policial, ni “muerte sospechosa”. Se trata de un asesinato. 
 
La noche del sábado, Rémi cayó muerto tras un largo día de enfrentamientos. La víspera, quienes se oponían a la construcción del pantano pusieron en fuga a los vigilantes de las obras, apoderándose del terreno e incendiando lo que allí había quedado. Al día siguiente, los gendarmes móviles llegaron para proteger un aparcamiento vacío. Aunque la muerte de Rémi fue constatada por los bomberos a las dos, los gendarmes siguieren disparando contra los manifestantes hasta entrada la mañana. Al revés de lo que dijo la prensa, numerosos heridos fueron atendidos por los propios manifestantes en la misma Zona A Defender. A lo largo del fin de semana, la gendarmería no dudó en disparar pelotas de goma apuntando a la cabeza, ni en lanzar casi a bocajarro botes lacrimógenos y granadas ensordecedoras. Durante las semanas precedentes de ocupación militar, los gendarmes repartieron leña a diario, multiplicando las encerronas. El domingo por la tarde, en Gaillac, el día de la primera concentración, habiéndose anunciado ya la muerte de Rémi, cuando todo el mundo esperaba que no se dejaran ver, esos mismos gendarmes cargaron y dispersaron a la gente con vehemencia.

Lo que le pasó a Rémi habría podido pasarle a cualquiera, en el Testet o en otro lugar. Eso sí, a cualquiera que ese día mostrara determinación a la hora de practicar sus ideas al respecto. Así pues, ese día murió un muchacho y poco importa que fuera “pacifista” o “radical”. La noche del sábado se hallaba en la colina protestando contra la zona militarizada tratando de hacer retroceder a los maderos y las máquinas.
El domingo por la tarde dijeron que Rémi era pacifista y que quienes participaron en los enfrentamientos eran anarquistas. Tales afirmaciones no se pueden tolerar. Decir estas cosas significa volver a las viejas divisiones y hacerle el juego al orden policial. La fuerza de los movimientos como el No TAV en Italia o la ZAD de Nantes y de otros sitios, consiste en ser capaz de agrupar unas prácticas que en lugar de oponerse se complementan, pudiendo de esta manera asociarse y caminar hacia victorias tangibles y materiales. La inteligencia de la lucha precisamente reside en la capacidad de transformar lo que a menudo surge como diversidad de tono o rígidas divergencias en tensiones a discutir y replantear que permitan aunar fuerzas y energías. O sea, en extraer un máximo de fuerza de una multitud de prácticas.

La idea de una Zona A Defender se nutre de los forasteros, por eso el “tú no eres de aquí” o el “nunca te habíamos visto antes” son una solemne tontería. Sin el apoyo masivo de mucha gente, la ZAD de Notre-Dame-Des-Landes jamás hubiera podido resistir a los maderos y las máquinas. La ZAD del Testet, igual que las demás ZAD, no es solamente un problema local, sino que lleva consigo una idea de la vida en lucha contra el desarrollismo, la ordenación del territorio y la propia existencia de la policía.
Ahora, hay que centrarse en la respuesta.

Cuando el 2008 Alexis fue asesinado en Grecia por la policía, la protesta se extendió por todo el país. 

Cuando el 2005 Zyad y Bouna murieron electrocutados al tratar de escabullirse de la persecución policial, hubo semanas de violentas asonadas en los suburbios franceses. Opinamos pues que no reaccionar significaría una derrota. No hay que dejar que el miedo se apodere de nosotros y nos reduzca a la impotencia. Están en juego nuestras vidas y nuestras luchas. Aunque el proyecto de pantano se paralizase o quedara provisionalmente parado, no por ello hoy podríamos cantar victoria.

Hemos escuchado frases como ésta: “cuidado, no hay que dejarse llevar por la ira”; o esta otra: “hay que andar con tiento”; o aún: “puede que dentro de poco el proyecto sea abandonado”. Esta manera de pensar la lucha no es de recibo. Habría que recordar a quienes hablan así que una vida vale mucho más que el abandono de un proyecto de pantano. La rabia que hoy nos invade no puede disiparse trayendo a colación cálculos administrativos o echando mano del miedo a que la masa se desborde. Ningún cálculo estratégico-mediático justificará jamás la represión de la cólera causada por la pérdida de un compañero. No importa que unos hayan participado en la lucha contra el pantano y otros no. La reacción que ha de desencadenarse ahora sobrepasa con mucho el carácter local de la protesta. Ayer ya hubo manifestaciones por toda Francia y esto es sólo el comienzo.

No importa lo que diga la autopsia. No importa lo que digan los medios de comunicación. La verdad la conocemos todos y no necesitamos otra: los maderos han matado a Rémi.

No queremos hacer de Rémi un mártir; de lo que se trata es de aprovechar su muerte para impedir toda marcha atrás. Salir victoriosos de la lucha es hacerse cargo la situación juntos de nuevo. Primero, dando vida a lo que empujó a Rémi y a otros miles hacia las verjas, y acto seguido, demostrando nuestra capacidad de construir un movimiento.

Ahora, en cualquier parte, organicémonos.

A la vida.

A Rémi.

# Panfleto distribuido en la ZAD del Testet el fin de semana pasado. Traducido por Argelaga.
#Noviembre 2014, Francia